jueves, 12 de diciembre de 2024

CIEN AÑOS DE SOLEDAD

 



     Por Joaquín Peña Arana

 

 

     Disculpen, pero no pude.

 No pasé de los primeros cinco minutos del primer episodio de la serie.

     Quizás es una cuestión de ánimo, o deba esperar otro momento. Definitivamente no creo que sean los partidos de ida y vuelta de la gran final del futbol nacional (se juega esta semana).

     Podría ser esto: pasé tantos años imaginando mi propia versión cinematográfica El diseño de producción. El estilo. En mi mente, el desarrollo de la saga de los Buendía era más cercano a una de esas producciones estilo Merlín, la que protagonizó Sam Neill, o del tipo de El Señor de Los Anillos (describiría cómo lo imaginaba pero, con eso del plagio, mejor esperaré otro momento). Y rara vez les puse rostro a los personajes, por extraño que pueda parecer. Era, más bien, ver las figuras, rasgos sencillos, la vestimenta más o menos básica acorde a los acontecimientos y la época. Cosas así. Tenía mi idea de cómo empezar la historia e, incluso, cómo terminarla en términos visuales. Pero no, nunca como lo que vi en esos primeros cinco minutos.

     Y ya sé que hay infinidad de libros que se han convertido en películas y no siempre cuajan porque no es lo mismo, pero entiendo muy bien que son géneros diferentes. Yo vi primero El Padrino y muchos muchos años después leí la novela, y puedo habitar muy bien en ambos mundos. Y hay infinidad de versiones de Moby Dick y a veces el cine le ha hecho un favor a la novela. ¿Hay alguna versión cinematográfica de Frankestein o Drácula que puedan considerar la definitiva? O cuántos clásicos latinoamericanos han sido adaptados al cine, ¿alguna que digan “esta fue la mejor adaptada al cine” o viceversa?

    Y no pretendo disuadirles de ver la serie. Véanla, sean libres de ver lo que quieran. Solo es mi opinión y quería compartirla.

      Quizás me anime a ver la serie en cosa de días o, quizás, siga el consejo de Gabo quien, sobre adaptar Cien Años a la pantalla, alguna vez dijo: "prefiero que mis lectores sigan imaginándose mis personajes".

No hay comentarios:

Publicar un comentario