domingo, 27 de enero de 2013

INVICTUS





Por Joaquín Peña Arana

Veo Invictus a la distancia, no en su tiempo. Dicen que Eastwood la hizo pensando en ganar premios, aprovechar la popularidad de Obama y ganar puntos previo al Mundial de Futbol en Sudáfrica.  Pero como obra examinada años después, sus lecturas difieren y en mucho a esas y otras predicciones.

Lo primero que veo es una cinta hecha con toda la mano de los altísimos presupuestos hollywoodenses, màs cercana a otro tipo de cine que al que Clint Eastwood nos tiene acostumbrados. No parece haber mucha diferencia entre cintas como algunas de Robert Redford o al estilo Un Juego Perfecto, nomás observen el final:  cámara lenta en las escenas, música grandilocuente y todos felices y contentos porque se obtuvo el triunfo. Pero hey, aguas, no es una película boba ni mediocre.

Invictus me deja varias sensaciones. Una de ellas, con toques de amargura. En lo personal, tengo mucho que no siento esa alegría de sentirme nación. La última vez fue en 2000, cuando ganó Vicente Fox. Hasta compré una botella de sidra y la compartí con mi jefa y con quisiera. Han pasado muchos años desde entonces y no veo un país con ganas de unión y, mucho menos, de perdón.  En eso insiste Mandela: el perdón. Pero, perdón genuino, no de dientes para afuera o para la entrevista en la tele.  

Ahora, si no saben quien es Clint Eastwood, Nelson Mandela o qué es el rugby, no hay problema. ¿Busca un tipo de película para levantarse el ánimo, para el curso de superación  personal y agarrar herramientas para la diaria existencia? Ahí tá Invictus.  El jugador de rubgy, tan blanco y afrikáner, es seducido por la personalidad de Mandela, un hombre que estuvo en prisión 27 años y está dispuesto a dejar el pasado atrás. De ahí en adelante es el camino para unir a un país dividido a través del deporte y un poema que puede ofrecer fortaleza cuando la cárcel es la diaria realidad.

Así, después de ver Invictus, cómo evitar traer en la cabeza eso de “soy el amo de mi destino… soy el capitán de mi alma”.





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